En su reunión de política monetaria de mayo de 2023, la la Reserva Federal de los Estados Unidos (Fed) subió la tasa de fondos federales de manera unánime, a un nivel máximo de 5.25%, en línea con la expectativa del mercado.
La política monetaria en EUA es cada vez más restrictiva, ya que al aumento de la tasa de interés se suma la reducción de su hoja de balance. Lo anterior seguirá impactando las condiciones crediticias de empresas, familias y sector bancaria que son inciertas (resiliente y sólido a decir de la Fed).
La Fed advierte que estará dispuesta a reaccionar en su postura monetaria ante cualquier riesgo y que los próximos movimientos serán dependientes de los datos.
En su diagnóstico, se advierte que la actividad económica se mueve a un ritmo moderado, con ganancias laborales fuerte y un descenso en la tasa de desempleo, aunque la inflación sigue en niveles altos (particularmente la inflación no subyacente).
En mi escenario central, espero que la Fed suba otros 25pb su tasa de referencia en junio, antes de hacer una pausa para valorar potenciales bajas en 2024, aunque los riesgos en la banca persisten desde mi punto de vista y los fantasmas de recesión aún persisten.
En el caso de Banxico, tendrá que replicar al menos el movimiento de la Fed para su reunión del 18 de mayo, aunque en el caso de México el desacoplamiento y recortes de tasa aún esta muy lejos de ocurrir, ya que las expectativas de inflación siguen muy por arriba del objetivo de Banxico y la inflación subyacente sigue persistentemente alta.