Existe una relatividad entre lo que en el tiempo indicamos sobre un hecho, y que cambia el curso del entorno, a donde un ser está presente dentro de un espacio, y en el cual influye en el origen. Entre más altere al espacio natural, mayor será la consecuencia en tiempo transcurrido de hacer lo mismo, y no remediar en un intervalo de tiempo.
En el mundo ha surgido una dilatación del tiempo en los cambios al ambiente, debido a que entre más cercano creemos que estamos en resolver al problema ocasionado por la humanidad al entorno, más alejados estamos de la relatividad real, creando un futuro difuso virtual. Iniciando por un origen en el tiempo, surgido de las necesidades económicas, energéticas y de la evolución requeridas por los individuos dentro de una sociedad en el espacio.
Ha quedado claro, el hombre no dejará de alterar al orden natural, siendo esta última la que tiene que autorregular en forma continua a la energía, y la cual depende de una masa, en un intervalo de tiempo, y la cual ha sido transformada.
La contaminación, desde que el hombre ha requerido reducir las distancias entre dos puntos, ha tenido que incurrir en cambiar a su entorno, realizando infraestructura, medios de transporte, y hoy día, el poder tener energía infinita para mover a las economías.
La alteración del medio ambiente por medio del cambio climático (el cual este ya sucedió), los gases de efecto invernadero, el calor que emana de procesos fisicoquímicos, malas reacciones de combustión de los vehículos, etc. Ha ocasionado la relatividad ambiental.
En México, la relatividad ambiental está sujeta al querer desdoblar el tiempo de reacción, al querer llegar de un punto A a B deseado, tratando de alterar al espacio por medio de palabras o documentos en papel; y que no ayudan a tener un futuro real. Al no estar ligado a inversiones que desarrollen propias tecnologías o el tener de otras latitudes del planeta.
México podría quedar fuera del futuro de América del Norte[1], respecto a la transición energética, derivado que Canadá y Estados Unidos, nuestros dos socios comerciales en pasados días, han dejado claro cuál es y será, su transición ente ambos al realizar un nuevo tratado comercial-ambiental. ¿Será que el TMEC, termine en 2026?
En México continuamos perdiendo el tiempo, y hacer a un lado la cubeta de cangrejos que hoy día estamos inmersos, alterara nuestra relatividad en el espacio, alejándonos cada día del punto inicial, y esto acelerará nuestro deterioro económico, tecnológico y desarrollo en el futuro. La realidad es única, entre los dos socios comerciales del TMEC, representan el 50% del total de la inversión extranjera directa, y que se incorpora en la economía mexicana. Además, que somos cautivos de las refinerías de EUA, debido a que en 2022 importamos más de 375 millones[2] de barriles de combustibles. ¿Entonces qué somos para EUA-Canadá?
México, el cuarto consumidor a nivel mundial de combustibles derivados de los hidrocarburos , y ha quedado claro, no dejaremos de utilizar a estos, cuando menos entre 5 a 7 décadas más.
La relatividad ambiental de México, debemos enfatizar que en forma diaria son producidos alrededor de 506 mil toneladas de CO2 equivalente por día, derivado de un consumo de 800 mil barriles de gasolina y 400 mil de diésel.
Las emisiones tan solo gasolina son de alrededor de 324 mil tCO2e por día, y esto equivale 780 mil barriles adicionales de gasolina; es decir, en México por cada barril quemado en los motores, consumimos otro por efectos de las emisiones a la atmosfera. Respecto al diésel, producen 183 mil tCO2e por día, teniendo la misma relación como la gasolina de 1:1.
En la Zona Metropolitana del Valle de México, a donde se presentan contingencias ambientales, y por ende existe un programa de no circulación de ciertos vehículos, para no generar una mayor cantidad de contaminantes, es de vital importancia el entender que esta ha aumentado ante un crecimiento mayor de motores circulando.
Considerando solo al Estado de México y la Ciudad de México, consumen entre 100 a 110 mil barriles diarios de gasolina (13 millones de vehículos circulando), esto equivale a 45 mil tCO2e por día, y 38 a 40 mil barriles de diésel (1.5 Millones circulando), representan 18 mil tCO2e por día, teniendo la misma relación de 1:1 que existe a nivel país entre lo quemado y lo emanado de contaminantes. A esto hay que adicionar que existen alrededor de casi 7 millones de hogares, los cuales consumen cada uno de ellos alrededor de 1.85 litros de gas licuado de petróleo (GLP), y esto produce 20 mil tCO2e por día, que equivale a consumir en forma diaria 0.5 litros adicionales por casa. ¿La contaminación provendrá en gran parte de esto?
En el ZMVM, el problema ambiental que causa contingencias, no es originado en su totalidad por agentes contaminantes provenientes de plantas cercanas que realizan combustión. Radica principalmente por el escape de los vehículos, y que actualmente no vemos el humo negro como antes; pero si aportan gran parte del problema; al no tener una combustión completa. Originada por haber una baja eficiencia en los motores, al tener un aire con saturación bajo en el contenido de oxígeno.
Los cálculos anteriores provienen de la calculadora de emisiones para el registro nacional de emisiones de la SEMARNAT, y datos del INEGI. Para poder reducir esta cantidad de contaminantes debería ocurrir lo siguiente:
- Primero tener un parque vehicular no mayor a cuatro años. En México, es de más de 8 años, y aumentará al adicionar la regularización vehículos de dudosa eficiencia.
- Circular motores actualizados, y con tecnología que consuman menos combustibles por KM recorrido.
- Contar con una infraestructura de movilidad en ciudades y carretas en el país, y que generen una conectividad eficiente, llevando al motor a un mejor rendimiento. Esto sería logrado utilizando todo el IEPS recaudado, para esto[3].
- Utilizar oxigenantes que ayuden a tener una mejor combustión, debido a que los motores, ninguno, alcanza una completa hoy día. Obteniendo siempre en la reacción monóxido de carbono, y no el dióxido de carbono, requerido este último para la fotosíntesis de las plantas para que puedan producir oxígeno.
Nuestra relatividad ambiental está basada en una teoría de papel, y no en una real ligado a cálculos fisicoquímicos. El simple hecho de ver humo no significa contaminación, debido a que en México no existe una cultura de monitoreo continuo dentro cada proceso en las diferentes industrias que generar en el tiempo contaminantes a la atmosfera. Nuestras normatividades son de causa-raíz, y no de prevención. Es decir, actuamos cuando ya tenemos el problema ambiental. Preguntan cómo cambiar esto, si no existe una autonomía de la SEMARNAT, ASEA y todos los entes reguladores, para prevenir y no sancionar el hecho ocurrido.
La relatividad ambiental, originada en el mundo, ha sido creada por el creer que el tiempo, es controlado por ideas en papel, y no basada en hechos reales que acerca o alejan de una realidad en el espacio.
[1] https://twitter.com/economiaoil/status/1639465847629524993?s=20
[2] https://twitter.com/economiaoil/status/1637822203159871489?s=20
[3] https://twitter.com/economiaoil/status/1639970761547841536?s=20