En el actual sistema lineal los problemas crecen: además de la crisis ambiental, se han evidenciado otras contrariedades como las debilidades de las cadenas de valor, con escasez de suministros y aumentos de costes o aumento de riesgos relacionados con vulneraciones de Derechos Humanos.
Al mismo tiempo, seguimos consumiendo como si tuviéramos 3 planetas Tierra(1), desperdiciando recursos y generando problemas de residuos, contaminación de suelos, emisiones de GEI, pérdida de biodiversidad, incremento de las desigualdades, impacto en la salud, etc.
Nuevo modelos de desarrollo y negocio
Cada vez más voces se suman al modelo de Economía circular, un marco de soluciones sistémicas que propone un nuevo modelo de producción desvinculado del consumo de los recursos finitos del planeta, según la definición de la Fundación Ellen Macarthur (2) una de las instituciones de referencia mundial en la materia.
La economía circular supera el actual modelo imperante de las 3 R, de reducir, reutilizar y reciclar y propone la teoría de las 7 R: Rediseñar-Reducir-Reutilizar-Reparar-Renovar-Recuperar-Reciclar.
Este modelo se asienta en 3 principios:
- Eliminar los residuos y la contaminación.
- Circular los productos y materiales (en su valor más alto).
- Regenerar la naturaleza.
Estos tres principios están a su vez impulsados por un cambio respecto a la forma de diseñar productos, ya que hasta el 80 % de los impactos medioambientales se determinan en la fase de diseño de estos, lo que ocasiona que muchos artículos se descomponen con demasiada rapidez, no pueden reutilizarse, repararse o reciclarse fácilmente, y, en muchos casos, están concebidos para un solo uso.
Beneficios de la Economía Circular para las empresas
La Economía circular responde a desafíos globales y promueve la construcción de un sistema resiliente, bueno para las empresas, las personas y el medio ambiente.
Resumimos a continuación los principales aspectos positivos para las empresas:
- Eficiencia en el uso de los recursos: propone una optimización de los stocks y los flujos de materiales, energía y residuos.
- Creación de los «productos como servicios» u otros modelos similares, en los que los productores conservan la propiedad del producto o la responsabilidad por su rendimiento a lo largo de su ciclo de vida
- Creación de riqueza local y no deslocalizable: promueve la reparación de los productos, y la utilización de los residuos, que propicia la creación de nuevos empleos y potencia las sinergias entre empresas locales y cercanas entre sí, donde el residuo de una, es usado como materia prima por otra empresa próxima.
- Seguridad del suministro y reindustrialización de territorios nacionales: reduciendo los costes y los riesgos de depender de cadenas de suministro globales. Impulso de la simbiosis industrial.
- Reducción del uso de recursos naturales y la huella ambiental: los residuos de unos se convierten en recursos para otros. El producto debe ser diseñado para ser deconstruido. Las cadenas de suministro se acortan.
- Nuevas oportunidades de negocio e innovación: se estima que la economía circular arrojará beneficios netos en términos de crecimiento del PIB y creación de empleo en todo el mundo. El Plan de acción de Economía Circular de la Unión Europea prevé un aumento del PIB del 0,5 % adicional de aquí a 2030 y la creación de alrededor de 700 000 nuevos puestos de trabajo.
Las empresas tienen la oportunidad de sumarse a la economía circular, como una oportunidad para reorientar su modelo de creación de valor.
Hoy en día existe la normativa adecuada, que incentiva y crea marcos normativos para implementar esta estrategia como la Ley de Economía Circular de la Ciudad de México (LEC_CDMX), que se publicó el 28 de febrero de 2023, en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México, además de unos consumidores cada vez más conscientes y motivados.
Una transición transformadora
La economía circular se enmarca en las diferentes soluciones que se están planteando para propiciar un desarrollo sostenible. Es un reto porque afecta al sistema en su conjunto, se trata de un modelo que exige una transformación para lo cual es imprescindible:
- La cooperación de todas las partes interesadas y en todos los ámbitos de actuación, a nivel local, nacional e internacional, porque en muchas ocasiones habrá efectos no deseados.
- Formación, tanto para las empresas como para los ciudadanos y los gobiernos.
- Una nueva mentalidad y actitud, desde el proceso de concepción y diseño de los productos, hasta el modelo de negocio.
- Potenciar la simbiosis industrial y alianzas entre empresas, el replanteamiento de la cadena de proveeduría y los modelos de negocio.
Solo tenemos una Tierra, pero si seguimos consumiendo como en la actualidad, en 2050 el consumo mundial será el equivalente al de tres planetas. El consumo mundial de materias como la biomasa, los combustibles fósiles, los metales y los minerales se duplicará en los próximos cuarenta años (6) y la generación anual de residuos aumentará en un 70 % de aquí a 2050 (7)
Teniendo en cuenta que la mitad de las emisiones totales de gases de efecto invernadero (GEI) y más del 90 % de la pérdida de biodiversidad y del estrés hídrico se deben a la extracción y la transformación de los recursos, la economía circular es además de una oportunidad, una necesidad.
Referencias:
2.Fundación Ellen Macarthur: https://ellenmacarthurfoundation.org/es
3.Nuevo plan de acción para una economía circular de la Unión Europea https://eur-lex.europa.eu/legal-content/ES/TXT/?uri=CELEX:52020DC0098
4.Ley de Economía Circular de la Ciudad de México https://data.consejeria.cdmx.gob.mx/portal_old/uploads/gacetas/eff885ae4de05e2cae8ff80377f5205b.pdf
5.Ley General de Economía Circular
https://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/senclave/65/CS-LXV-I-1P-038/01_minuta_038_17nov21.pdf
- Global Material Resources Outlook to 2060.
- World Bank (2018), What a Waste 2.0: A Global Snapshot of Solid Waste Management to 2050.