Con la Iniciativa de Reforma Eléctrica, la Comisión Federal de Electricidad (CFE), asumirá la condición jurídico-constitucional, de organismo del Estado, con personalidad jurídica y patrimonio propios, aseguró Raúl Jiménez Vázquez, Abogado General de la CFE.
Durante la Reunión de la Comisión de Estudios Jurídicos del Gobierno Federal, dijo que, como parte del rediseño constitucional, la CFE “deja de ser empresa productiva del Estado, una concepción neoliberal, desnacionalizada, extranjerizante, planteada por organismos del exterior, como la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico, el Fondo Monetario, el Banco Mundial.”
“Y el lugar de empresa productiva del Estado, con solo fines de rentabilidad económica, Comisión Federal de Electricidad, asumirá la condición jurídico-constitucional, de organismo del Estado, no organismo descentralizado, no ente paraestatal, organismo del Estado con personalidad jurídica y patrimonio propios y además dotada de autonomía en el ejercicio de sus funciones, y en su administración.”
De igual forma, se integra como un solo organismo de Estado en forma vertical y horizontal. “Solo van a subsistir, por razones de manejo estratégico, la empresa productiva subsidiaria, CFE Telecomunicaciones e Internet para todos y las filiales CFE Energía, CFE Internacional y CFE Capital.”
Rediseño constitucional orgánico y funcional
Jiménez Vázquez, expuso que “consecuencia de este rediseño, de carácter constitucional orgánico y funcional, se va a eliminar el absurdo régimen de estricta separación legal, entre el corporativo, las empresas productivas subsidiarias, y nuestras empresas filiales.”
Además, el Centro Nacional de Control de Energía, CENACE, se reincorpora a la Comisión Federal de Electricidad.
Reforma Eléctrica congruente con tratados comerciales
El Abogado General de la CFE sostuvo que la propuesta constitucional se inscribe perfectamente en los compromisos asumidos por el Estado mexicano en el contexto de los Tratados de Libre Comercio.
Mencionó que México ha suscrito, suscrito a lo largo del tiempo 14 Tratados de Libre Comercio, de todos ellos los más importantes son, indiscutiblemente, el Tratado Trilateral México-Estados Unidos y Canadá, conocido como TMEC. Dos, el Tratado TIPAT, Tratado Integral Progresista de la Asociación Transpacífico. Y tres, el TLCUEM, el Tratado de Libre Comercio con la Unión Europea.
Reforma Eléctrica y T-MEC
En cuanto al T-MEC en cuatro capítulos fundamentales. Primero, el capítulo 8, energía, que establece (uno) que las partes confirman su pleno respeto por la soberanía y su derecho soberano a regular los asuntos abordados en este capítulo.
“Y dos, ¡ojo! Dos, México se reserva su derecho soberano de reformar su Constitución y su legislación interna en términos y en la materia de energía. Refirió también un punto concreto del capítulo 14 de inversión. Ahí se señala en forma clara y precisa que no constituyen expropiaciones las acciones regulatorias cuyo fin es proteger objetos legítimos de bienestar público.
Y en el capítulo 21, política de competencia se señala que los estados tienen la obligación, el imperativo jurídico de llevar a cabo el combate a las concentraciones monopólicas; y justamente lo que produjo la reforma energética del 2013 fue un conjunto de monopolios privados violentando las reglas de libre concurrencia y de libre competencia.
Finalmente, el Capítulo 27 Anticorrupción. Ahí se señala que las partes asumen el compromiso de prevenir y combatir la corrupción en el comercio y la inversión.
“Si algo caracteriza a este producto anómalo de la reforma energética del 2013 fue una larga cadena de fraudes a la ley, simulaciones, violaciones flagrantes a la normatividad nacional y cadena de actos de corrupción.”
Subrayó que “a la luz de todo esto no cabe duda que la iniciativa presidencial es absoluta y perfectamente congruente y compatible con los compromisos asumidos en el contexto de los tratados de libre comercio.”
Electricidad, área estratégica
En la iniciativa del Ejecutivo Federal se restablece la electricidad como área estratégica del Estado en términos de los artículos 27 y 28 Constitucionales; esto es, en consonancia con los términos históricos que antes de la reforma trágica del 2013 tenía este sector reservado exclusivamente al Estado por conducto de Comisión Federal de Electricidad.
Esto quiere decir que la propuesta presidencial plantea que la cadena de valor de toda la industria eléctrica, desde la generación, transmisión, distribución, comercialización o abasto, estará integrada como área estratégica de la economía nacional en los términos y para los efectos del artículo 28, párrafo cuarto, de nuestra ley fundamental.