En la primera quincena de junio de 2021 el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) tuvo una inflación de 0.34 por ciento respecto a la quincena inmediata anterior, el nivel más alto en los últimos 10 años.
Información del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi)Indica que la inflación anual se ubicó en 6.02 por ciento. En el mismo periodo de 2020, la inflación quincenal fue de 0.32 por ciento y de 3.17 por ciento anual.
La inflación en los precios de los energéticos no cede, en la primera quincena de junio fue de 0.59%, nivel por debajo del 2.59% del año pasado. En los últimos doce meses, se acumula un alza de precios promedio de 18..54%.
El gas doméstico reporta un alza de 1.62%, mientras que la electricidad subió 0.92%, los dos niveles por arriba del promedio del periodo.
El índice de precios subyacente registró un aumento de 0.35 por ciento quincenal y de 4.58 por ciento anual; por su parte, el índice de precios no subyacente avanzó 0.31 por ciento quincenal y 10.61 por ciento anual.
Al interior del índice de precios subyacente, a tasa quincenal, los precios de las mercancías crecieron 0.42 por ciento y los de los servicios 0.28 por ciento.
Dentro del índice de precios no subyacente, los precios de los productos agropecuarios subieron 0.13 por ciento y los de los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno lo hicieron en 0.45 por ciento quincenal.
Inflación subyacente se acelera
La variación quincenal fue la más alta para una 1QJunio desde 2002, destacando presiones en algunas mercancías por altos precios de insumos (tortilla); y, en servicios, por la reapertura económica (loncherías y fondas, restaurantes, transp. aéreo, paquetes turísticos). También hubieron alzas secuenciales en energéticos (electricidad, gas, gasolina), de acuerdo con el reporte de análisis de Casa de Bolsa Ve por Más.
Inflación anual no cede; subyacente se acelera
La inflación general anual se aceleró por segunda lectura al hilo, pero logró mantenerse debajo del pico de la 2QAbr (6.12%). Lo anterior, no obstante que el índice no subyacente se moderó en el margen, al enfrentar una base comparativa más alta que en mayo, en particular, en el rubro de energéticos.
Por otro lado, la inflación subyacente se aceleró por tercera quincena y registró una variación no vista desde inicios de 2018. Al interior, las mercancías presentaron pocos cambios y se mantuvieron elevadas, por efecto de los altos precios de materias primas (energía, metales, granos) y disrupciones en las cadenas mundiales de proveeduría y distribución, mientras que los servicios extienden su rebote, pues el menor confinamiento ha impulsado la demanda por los mismos.
Aquí puedes consultar el informe: https://bit.ly/3gPGZiy
CitiBanamex: La inflación en la primera quincena de junio en máximo de 19 años para una quincena similar
Los precios al consumidor registraron un crecimiento quincenal de 0.34% en la primera mitad de junio, mayor que nuestra estimación de 0.22% y el consenso de nuestra última Encuesta Citibanamex de Expectativas (ECE) de 0.20%. En términos anuales, la inflación general fue de 6.02%, luego de la tasa de 5.99% observada hace quince días.
Los precios subyacentes aumentaron 0.35% quincenal, por arriba de nuestra proyección de 0.21% y la expectativa del consenso de 0.20%. Esto se debió, principalmente, al incremento de 0.42% en los precios de las mercancías, especialmente de los productos no alimenticios. Los precios de los servicios crecieron 0.28%, impulsados por los mayores precios de los servicios distintos a la educación y la vivienda, en particular de tarifas aéreas y restaurantes. A tasa anual, la inflación subyacente alcanzó 4.58%, mayor a la tasa de 4.51% registrada en la quincena anterior.
La inflación no subyacente fue de 0.31% quincenal, o 10.61% anual, después de la tasa de 10.69% anual registrada dos semanas antes. La tasa de inflación anual no subyacente estuvo en línea con nuestra proyección de 10.56% anual y ligeramente por arriba de la mediana estimada en nuestra ECE de 10.49% anual. Los precios de la energía explican la mayor parte del aumento quincenal, con un crecimiento quincenal de 0.59% derivado de mayores tarifas eléctricas y precios del gas. Los precios agropecuarios aumentaron 0.13%, en gran medida por los mayores precios del jitotomate, naranja y carne de res.
Confirmamos nuestras estimaciones para la inflación general y subyacente al cierre de año de 5.6% y 4.2%, respectivamente. Esperábamos una inflación general quincenal muy por arriba de su promedio histórico, pero ciertamente no tan elevada. Las inflaciones quincenales general y subyacente alcanzaron máximos de 19 y 22 años para una primera quincena de junio, respectivamente. A pesar de la sorpresa significativa, seguimos viendo estos choques como parte del proceso de reapertura de la economía (más rápida que lo anticipado) después de meses de restricciones a la movilidad debido al Covid, y consideramos que es demasiado pronto para decir si este elevado crecimiento de los precios contaminará el mecanismo de formación de precios. Nos inclinamos a pensar que no será el caso, y esperamos que las presiones sobre los precios se moderen en cierta medida en la segunda mitad del año. En una nota reciente,[1] discutimos con mayor detalle nuestra última perspectiva para la inflación y, si bien reconocemos la sorpresa relevante de hoy, no la cambia sustancialmente.