San Blas Atempa, Oaxaca.- Iberdrola México instaló sistemas fotovoltaicos en 11 comunidades rurales, población que iniciará su primera generación con el servicio de electricidad.
Se trata de 99 viviendas y una escuela de comunidades rurales sin acceso al servicio eléctrico de Oaxaca, estado que suma ya más de 4,500 personas beneficiadas con energía limpia y renovable a través del programa social Luces de Esperanza.
Generación tras generación, bisabuelas, abuelos, padres, hijos, nietos han vivido sin luz en sus hogares. Aún y cuando sus comunidades no están tan alejadas de zonas urbanas, la electricidad no había llegado por la falta de infraestructura y viabilidad financiera para la empresa estatal de energía.
En estas comunidades, no tenían electrodomésticos tan básicos como una licuadora o una pantalla de televisión. La lámpara de petróleo, radio de pilas eran los medios tradicionales en zonas de amplia oscuridad por las noches.
Luces de Esperanza
El señor Faustino Espinosa, uno de los beneficiados solo tenía de compañía una radio con un pequeño panel para cargarlo al sol. Viudo y con hijos que ya formaron sus familias, comenta que cuando va al monte y regresa por la noche, le da gusto ver ubicar fácilmente su casa por el foco que alumbra.
Y, aunque no aspira a comprar a una licuadora, por ejemplo, al considerar las que las mujeres usan el molcajete, sí le gustaría una pantalla de televisión e invitar a sus amigos, luego de la jornada en el campo.
Para Victoriano Reyes Ramírez, parece algo tan sencillo tener un foco prendido para mucha gente, pero para él es cambiarle la vida a su familia, que generación, tras generación y más generaciones no conocieron vivir con energía eléctrica.
En ese sentido, no se cansa de agradecer, de corazón a Iberdrola México e Iluméxico, y a todos los participaron para que este fuera posible, desde el primer contacto con el personal que analizó la viabilidad del proyecto, así como al técnico instalador, que lo ha asesorado en el cuidado básico y seguimiento que dará para tener el servicio de manera permanente.
En tanto, en la casa de David Hernández, la felicidad es contagiosa pues las mujeres se dedican a hacer totopos para vender (totoperas) y tener iluminada la casa, les permite ser más productivas y cocinar más fácilmente.
Pero el cambio radical ha estado en la manera lavar la ropa, ahora cuenta con una lavadora semiautomática que les ahorra tiempo y esfuerzo físico. Todos estamos muy contentos, la familia es amplia y tenemos varios niños en la casa, desde bebé hasta adolescentes que ya saben qué es la electricidad, dijo Hernández.
Iberdrola México e Iluméxico aliados en una gran labor social
El programa social Luces de Esperanza de Iberdrola México, cuenta con Iluméxico como aliado técnico y el acompañamiento de gobiernos estatales y municipales, aporta un ahorro para familias acostumbradas a gastar parte de sus recursos en velas y pilas y les permite destinar más tiempo a actividades productivas.
Con una inversión de 7 millones de pesos para la instalación de paneles solares, la 4ª fase de Luces de Esperanza en Oaxaca impactó positivamente en 415 personas de 11 comunidades rurales de tres municipios oaxaqueños: San Blas Atempa, San Juan Guichicovi y San Francisco Ixhuatán.
“Nos congratula inaugurar la cuarta fase de Luces de Esperanza en Oaxaca. Con esta iniciativa buscamos que todas las personas tengan las mismas oportunidades de desarrollo, brindando un servicio tan esencial como es la electricidad. Este proyecto refleja nuestro compromiso con las comunidades”, señaló Paola Martínez, directora de Comunicación y Responsabilidad Social de Iberdrola México, durante el evento de encendido en la comunidad de Shabaconde, en el municipio de San Blas Atempa.
“Somos la primera generación con electricidad en nuestras casas. Hoy comienza una nueva etapa para nuestra comunidad, más iluminada y más unida que nunca por el programa Luces de Esperanza Gracias por voltearnos a ver”, afirmó Victoriano Reyes durante la ceremonia, que contó con la participación de Adalberto Velázquez, presidente municipal de San Blas Atempa, donde se iluminaron 44 viviendas y 1 escuela.
Más de 7,700 beneficiarios en México
El programa Luces de Esperanza de Iberdrola México suma hoy más de 7,700 personas beneficiadas en los estados de Oaxaca, Puebla y San Luis Potosí.
Se puso en marcha en noviembre de 2019 en comunidades rurales de la Huasteca Potosina, donde benefició a cerca de 1,400 personas. Dado el éxito del proyecto, en 2020 la compañía lo extendió al estado de Oaxaca, donde los beneficiarios suman ya más de 4,500 gracias a las cuatro fases desarrolladas en varios municipios.
En 2023, el programa se implementó por primera vez en el estado de Puebla, donde se impactó a más de 1,800 personas gracias a la instalación de paneles y baterías solares en 81 viviendas y 12 escuelas de comunidades rurales de 12 municipios.
Luces de Esperanza cuenta con un presupuesto asignado de 80 millones de pesos y contribuye al logro de varios Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), entre ellos el 1 -fin de la pobreza-, el 7 -energía asequible y no contaminante-, el 10 -reducción de las desigualdades-, el 11 -ciudades y comunidades sostenibles- y el 17 -alianzas para lograr los ODS-.
De acuerdo con cifras oficiales del Censo 2020 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en México el 1 % de la población carece de servicio eléctrico en sus viviendas. Este porcentaje representa a más de 1.2 millones de personas sin luz, ya sea porque residen en comunidades rurales remotas alejadas de la red convencional o en zonas urbanas donde las familias no pueden pagar el costo del servicio.