Dr. Pablo López Sarabia, profesor-Investigador de la División de Ciencias Económico Administrativas (DICEA), Universidad Autónoma Chapingo.
Las nuevas proyecciones de la Fed contemplan: i) un mayor crecimiento económico en 2023 y un ajuste marginal a la baja en 2024, pero en terreno positivo (“soft landing”), ii) un descenso en la inflación general y subyacente para 2023, 2024 y 2025, pero logrando la convergencia al objetivo hasta 2025. Finalmente, se contemplan recortes en su tasa de referencia por casi 100pb para el 2024.
La Fed dejó de manera unánime su tasa de referencia en un rango de 5.25% a 5.50%, se espera se materialice el “soft landing” de la economía estadounidense. En su decisión de política monetaria de diciembre, la Fed indicó que la actividad económica se ha desacelerado desde los niveles alcanzados en el 3T2023, en un entorno de empleo moderado y una baja tasa de desempleo. La inflación general y subyacente muestra un descenso importante, aunque la convergencia al objetivo del 2% en promedio se alcanzará hasta el 2025. Además, la Fed resaltó la solidez del sistema bancario en condiciones financieras claramente restrictivas, que afectan la solvencia y liquidez de las empresas y familias; no sorprende que en fechas recientes se haya incrementado la morosidad en el pago de tarjetas de crédito. Las estimaciones más recientes contemplan un crecimiento de la economía de EUA a 2.6% desde 2.1% en 2023 y a 1.4% desde 1.5% en 2024.
El descenso en la inflación general y subyacente; así como el anclaje de las expectativas de inflación abren la puerta de recortes en la tasa de referencia de la Fed para 2024. Las nuevas proyecciones de la Fed para la inflación muestran descensos generalizados para el 2023, 2024 y 2025, aunque la convergencia al objetivo de inflación del 2% en promedio se alcanzará hasta finales de 2025. Las proyecciones de inflación y los “dot-plot” ya contemplan recortes de hasta 100pb en la tasa de fondos federales en 2024. La postura del comunicado de política monetaria de la Fed se muestra más “dovish”, situación que se reflejó en un descenso en el yield de los bonos de 2 y 10 años de EUA por 28 y 15 puntos base respectivamente; al tiempo de un debilitamiento marginal del índice del dólar. Es importante recordar que la Fed mantendrá su objetivo de reducir su hoja de balance.
Este 14 de diciembre, Banxico estará listo para seguir con su tasa de referencia sin cambios (11.25%); aunque es claro, que la postura monetaria relativa de la Fed también abre la puerta para recortes a la tasa de referencia de Banxico, mismos que podrían materializarse en mi expectativa para el segundo semestre de 2024. Debería esperarse un mayor consenso al interior de la Junta de Gobierno, para apuntalar de manera clara la guía adelantada (forward guidance), pero la inflación subyacente sigue siendo la “piedra en el zapato”, a la que debemos sumar los riesgos geopolíticos locales e internacionales asociados a las elecciones en México y EUA.