La falta de planeación entre generación y consumo de energía genera problemas para controlar el sistema eléctrico, reconoció el director general del Centro Nacional de Control de Energía (Cenace), Ricardo Mota Palomino. Indicó que ya se trabaja en una planeación estratégica para los próximos 25 años.
Durante su participación en el Simposium Internacional de la Energía CANAME (SIEC 2023), con el tema “Evolución del Sistema Eléctrico Nacional y perspectiva futura”, sostuvo que “esto se desordenó completamente a fines del sexenio anterior, cuando se prometió -mediante moches- el desarrollo de proyectos privados y ahora tenemos problemas para controlar el sistema eléctrico.”
Explicó que realmente, el fenómeno que se ha presentado es un crecimiento muy alto de generación en algunas regiones del país. Por ejemplo, en el noreste se ha tenido crecimiento acelerado de energía eólica, en el occidente ha crecido la planta de generación fotovoltaica. Además, el gobierno federal tiene el proyecto del Plan Sonora para desarrollar hasta 5 mil MW de energía fotovoltaica.
“El problema no es desarrollar proyectos, sino que lo que se produzca se consuma, no solo tener el recurso. Mucha capacidad que no se consume, lo que realmente es un problema; y para poner la oferta en los centros de consumo se necesitan redes de transmisión y distribución, esto requiere un esfuerzo cuidadoso de planificación para ir definiendo dónde deben estar los proyectos, cuándo y quién los va a pagar.”
Para tener una idea de la problemática, en 2019 se tenía una capacidad instalada de 78,447 MW y una generación neta de 317,820 GWhm la pasó de enero a abril de 2023 a 90,047 MW de capacidad instalada y 104 GWh de generación neta.
Además, se tienen solicitudes de interconexión de nuevos proyectos que ya están aprobados por la Comisión Reguladora de Energía (CRE) por más de 75 mil MW, adicionales a los 90 que ya teníamos, además de 407 estudios que realiza la Gerencia de Control Nacional.
Solamente en el Occidente hay una capacidad de 18,199 MW; en Oriental 16,283 MW; Norte 13,605 MW; Noreste 10,069 MW; Peninsular 9,494 MW; Baja California 5,406 MW; Central 2,558 MW; y Noreste 196 MW.
Por el lado de la carga, detalló, hay solicitudes de conexión en el Sistema Eléctrico Nacional (SEN) solo hay 3,428 MW de nuevas cargas y 90 estudios, es algo absolutamente ‘locuaz’.
Algunos de los retos que tenemos en adelante en la operación del sistema y la administración del mercado son cuatro: regulatorios, con la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica (2021); Planificación Eléctrica y la formalización de actividades; Transición Energética con generación variable intermitente y de hidroeléctricas; y la Flexibilidad del Sistema Eléctrico con nuevos servicios de reservas flexibles y la inercia.
No obstante, Mota Palomino destacó, que, por la naturaleza de las tecnologías, costos y tiempo de desarrollo de proyectos, es indispensable regresar a las mejores prácticas de planificación para el desarrollo del SEN.
“Estas actividades definen cantidades y tecnologías de generación energía y potencia, ubicación más adecuada fechas requeridas de integración de proyectos al sistema y redes de transmisión y distribución, asociadas al diseño futuro de abasto de energía eléctrica de todo el país.”
De igual manera, adecuar la organización del mercado eléctrico a las necesidades crecientes de un sector eléctrico en evolución derivado de la transición energética, y la incorporación acelerada de renovables y recursos distribuidos, aprovechando los recursos conectados con inversores incluyendo baterías entre otros en la industria eléctrica
Insistió que el problema grande del SEN es la planeación del sistema, se está trabajando, estamos haciendo un ejercicio de planificación de la expansión del sistema para los próximos 25 años.
Al respecto, bajo una planeación estratégica y gestión del conocimiento tangible e intangible, desde el ámbito de competencia del Cenace.
Se está forjando un sistema y mercados eléctricos más eficientes que logren conciliar los intereses económicos del mercado con la robustez técnica y el enfoque social necesarios en favor del país.
También destacó la necesidad de contar con el talento suficiente y especializado para opinar y mejorar la toma de decisiones en el sector eléctrico del país, gran parte de los funcionarios del sector “somos ya viejitos, mayores de 60 años”. Necesitamos formar talento y capacitarlo. De manera que “en lugar de estar pensando en cantar ranchero.”
Finalmente, comentó que el sector eléctrico se encuentra en evolución permanente tanto en sus componentes modelos agentes y nuevos recursos renovables por lo que es importante que sus actores identifiquemos los diferentes riesgos y se minimice su materialización en problemas reales.