En su reunión de julio de 2021, los miembros de la OPEC+ no lograron un acuerdo para incrementar la producción en 2 millones de barriles en lo que resta del 2021 y mantener recortes hasta 2022. Lo anterior, es una buena y mala noticia para México, ya que impulsará los ingresos petroleros; pero también incrementará los costos de las importaciones de gasolina.
La recuperación de la demanda agregada ante la reapertura económica global y el buen desempeño de la economía China y de EUA, mantendrá el alza de los precios de los energéticos ante la falta de acuerdos para regularizar la producción. En la reunión de la OPEC+ de julio de 2021, los Emiratos Árabes Unidos bloquearon la posibilidad de incrementar la producción de petróleo en 2 millones barriles en un lapso de agosto a diciembre y mantener recortes hasta 2022.
A punto de terminar la 18 reunión ministerial del grupo OPEP Plus @OPECSecretariat pic.twitter.com/1nQ165qZ9h
— Rocío Nahle (@rocionahle) July 2, 2021
La debilidad fiscal hace que muchos países miembros de la OPEC+ quieran incrementar su oferta para aumentar sus ingresos y que la carga de los recortes sea compartida por todos. El avance en el proceso de vacunación en las principales economías desarrolladas, los planes de estímulo fiscal y de infraestructura en EUA; así como la normalización paulatina de las cadenas de suministro globales seguirán apoyando la demanda de energéticos, así que será difícil mantener los recortes de la OPEC+.
El alza del precio de crudo de referencia es una buena noticia para México, pero también una mala, ya que existe una correlación positiva del 98% con el precio de la gasolina de EUA, situación que incrementará el costo de sus importaciones y el deterioro de la Balanza Petrolera de México.
El alza del precio de crudo de referencia es una buena noticia para México, pero también una mala, ya que existe una correlación positiva del 98% con el precio de la gasolina de EUA, situación que incrementará el costo de sus importaciones y el deterioro de la Balanza Petrolera de México.
En el primer semestre de 2021, los preciosinternacionales del crudo aumentaron 40%; mientras la gasolina en EUA y el gas natural se incrementaron en 56% y 37%, respectivamente. Lo anterior, tienen un efecto ambivalente para México, ya que sigue exportando una menor plataforma de petróleo, pero ha incrementado sus importaciones de gas natural y gasolina que explican una Balanza Petrolera deficitaria desde 2014. Sin duda, es urgente que las empresas productivas del estado mejoren su estrategia de administración de riesgos, en conjunto con el gobierno federal para neutralizar la volatilidad en los precios de los energéticos.
La falta de acuerdo en la OPEC+ podría impactar la inflación de México, ya que seguirá impulsando la inflación no subyacente; así como el precio de productos como las tortillas. El precio del gas LP y natural siguen su avance, al tiempo que las materias primas a nivel internacional siguen su ascenso ante un eventual “superciclo” que ha impulsado el precio de maíz 17%, en la primera mitad del 2021.
Los estímulos fiscales al IEPS de gasolinas no podrán compensar las alzas en los precios de las gasolinas, así que el próximo gobernador de Banxico, Arturo Herrera, tendrá que lidiar con una inflación persistente tanto en la parte subyacente como no subyacente.
Profesor-Investigador de la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno, Tecnológico de
Monterrey, Campus Santa Fe.
E-mail: [email protected]