Con la ambición de obtener el Contrato Colectivo de Trabajo de la empresa transnacional General Motors de Silao, Guanajuato, sindicatos y activistas declarados contrarios a la CTM, llamados independientes junto con organizaciones de Estados Unidos, se aprestan a apoderarse mediante ataques y presiones del control de los trabajadores, ante el próximo recuento (segundo autorizado) para legitimar la relación laboral, en medio de fuertes tensiones y de un clima violentado por fuertes rumores para influir en la opinión pública de que son la mejor opción,
Desde junio pasado en que se autorizó el primer recuento entre los 6 mil trabajadores que laboran en esa planta, pero fue suspendido por falta de garantías, a partir de ahí sindicatos afiliados a una organización sindical independiente, se ha dado a la tarea de denostar que el sindicato “Miguel Trujillo López”, afiliado a la Confederación de Trabajadores de México (CTM), han presionado a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, que encabeza Luisa María Alcalde, para que funjan como observadores y han propalado todo tipo de embestidas de que se mantiene a los trabajadores amenazados, con la intervención de intereses norteamericanos.
Sin embargo, la CTM que lidera Carlos Aceves del Olmo, fijo su postura: “…no hay oposición por parte de la CTM, a que se realice el proceso de legitimación del contrato y el conteo, donde se garantice la voluntad mayoritaria de los trabajadores, sin embargo, -añadió la central-, aclaró que no existe en ninguna parte de la legislación laboral mexicana anterior o en la nueva ley, argumento legal constitucional que obligue a realizar este ejercicio de votación de manera presencial en medio de la pandemia”.
Esto deriva de que el pasado fin de semana, la CTM y el sindicato “Miguel Trujillo López”, solicitaron a las autoridades laborales una nueva prórroga debido a que la tercera ola de contagios por el Covid-19, ha llegado a niveles, que ponen en riesgo la salud de los 6 mil trabajadores y observadores que tomarán parte en el proceso”. Hasta el cierre de esta entrega no había respuesta de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.
En este contexto, se ha desatado una fuerte embestida de los llamados sindicatos independientes, ligados a los de Estados Unidos, con una campaña de denostación para influir en la opinión pública, la mayoría de ellos ligados a los que asesora Arturo Alcalde Justiani, Padre de la actual Secretaria del Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde y que se han declarado alineados a la llamada 4T.
La otra vertiente es de los sindicatos automotrices de Estados Unidos, que manejando el discurso que en nocivo el actual sindicato de la CTM, alientan un conflicto de mayor alcance, que tiene claros indicios para llegar al cierre de la planta de General Motors, con tal de que retorne a Estados Unidos, bajo el argumento de que esos empleos pertenecen a los norteamericanos, que era el discurso que venía manejando el dirigente Tronca, que recientemente falleció y que siempre se manejó contrario al sindicalismo mexicano.
Para Ángel Celorio, Secretario Jurídico del Comité Nacional de la CTM, hay una clara injerencia de sindicatos de Estados Unidos, que deben frenar las autoridades laborales mexicanos, porque no puede ser posible que a organizaciones sindicales ajenas al contrato colectivo de trabajo, intervengan sin ningún límite para tratar de meter mano al proceso de recuento, el árbitro tiene que ser imparcial y evitar que haya “mano negra”, porque el clima es de extrema tensión que puede derivar en otros hechos que nadie desea.
Hay intereses oportunistas para tratar de influir en el recuento por parte de sindicatos llamados independientes, que buscan controlar esta empresa en la relación laboral y por otra parte, los intereses norteamericanos que presionan para que se llegue hasta el cierre de la empresa a fin de que retorne el capital a su país, lo que implicaría la destrucción de las fuentes de trabajo.
Respecto a la solicitud a las autoridades laborales para una prórroga en el recuento que originalmente está previsto para este 17 y 18 de agosto, la CTN, argumentó que es porque no se cuenta con un registro confiable de los cuadros de vacunación anticovid de los trabajadores de GM, ni tampoco se tienen las garantías suficientes para afirmar que no existirá algún riesgo sanitario en el conteo.
Y destacó que tampoco hay una disposición de los convenios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), ratificados por México o en el mismo capítulo 23 del T-MEC, un ordenamiento que exija, bajo estas condiciones sanitarias, participar obligatoriamente, más aún que el estado de Guanajuato, ha sido señalado recientemente por la misma Secretaría de Salud Federal como una entidad de alto riesgo de contagio.
Es así como la tensión crece en torno a este proceso, por lo que la CTM, advirtió que la nueva elección está programada para los 17 y 18 y se acordó incluir como observador del proceso al INE, por lo que: “..estará en manos de las autoridades determinar si es viable la petición de la CTM y su sindicato afiliado, de no ser así, la votación se llevará a cabo”