Dr. Pablo López Sarabia, profesor-Investigador de la División de Ciencias Económico Administrativas (DICEA), Autónoma Chapingo.
En su decisión de politica monetaria de diciembre de 2023, la Junta de Gobierno mantuvo sin cambios su tasa de referencia por unanimidad. Los impactos en la inflacion general vienen de incrementos en la parte no subyacente y a la persistencia de la subyacente; se espera que la inflación alcance su objetivo hasta el 2T2025. No sorprenden los incrementos marginales en las proyecciones de la inflación general y subyacente; por lo que será interesante ver las Minutas de la reunion de diciembre, a fin de ver si se discutió escenarios de recortes de tasas de interés, como ya lo contempla la Fed.
Hacia delante, se prevé que el proceso desinflacionario continúe, ante la postura de política monetaria y la mitigación de los choques derivados de la pandemia y de la guerra en Ucrania. Sin embargo, los pronósticos actualizados incorporan un descenso más gradual de las inflaciones de las mercancías alimenticias y de los servicios. Por esta razón, los pronósticos para las inflaciones general y subyacente se revisan al alza para algunos trimestres. Se sigue anticipando que la inflación converja a la meta en el segundo trimestre de 2025 (ver cuadro). Estas previsiones están sujetas a riesgos. Al alza: i) persistencia de la inflación subyacente en niveles elevados; ii) depreciación cambiaria; iii) mayores presiones de costos; iv) que la economía muestre una resiliencia mayor a la esperada; y v) presiones en los precios de energéticos o agropecuarios. A la baja: i) una desaceleración de la economía global mayor a la anticipada; ii) un menor traspaso de algunas presiones de costos; y iii) que los niveles más bajos del tipo de cambio respecto de inicios de año contribuyan más que lo anticipado a mitigar ciertas presiones sobre la inflación. Se considera que el balance de riesgos respecto de la trayectoria prevista para la inflación en el horizonte de pronóstico se mantiene sesgado al alza.