La Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX) firmó el “Amicus Curiae” que organizaciones de la sociedad civil integraron, para exhortar a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) a tomar en consideración el impacto al medio ambiente y a la competencia económica al resolver sobre la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica (LIE).
El decreto de reforma, publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 9 de marzo de 2021, da prioridad a las energías de combustibles fósiles generadas por la Comisión Federal de Electricidad (CFE), por encima de las energías limpias, lo que significa un incumplimiento a pactos internacionales que México ha firmado y de los que forma parte.
Por lo anterior, la sociedad civil ha presentado memoriales “Amicus Curiae”, que son documentos de contenido y forma libre en los que especialistas en el tema, asociaciones, agrupaciones o particulares acuden a los Ministros de la SCJN en su calidad de amigos a realizar manifestaciones y proponer argumentos para ayudar a la Corte a tomar la mejor decisión.
Con esta acción queda de manifiesto el interés de COPARMEX y de la sociedad civil para proteger el medio ambiente a través de ejercicios democráticos, como el “Amicus Curiae”.
LIE contra Cambio Climático
Es importante reiterar que el sentido de la reforma a la LIE contraviene los objetivos perseguidos por la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, el Acuerdo de París, el protocolo de Kioto, el T-MEC, entre otros que ha suscrito México con el fin de proteger el medio ambiente.
De concretarse estos cambios legales, actualmente controvertidos ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación, resultaría imposible para México reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, lo alejaría del objetivo de mitigar los efectos del cambio climático y vulneraría los derechos de los ciudadanos a gozar de un medio ambiente sano, un desarrollo sostenible y de salud.
En el ámbito económico, la reforma a la LIE sostiene la generación de energía eléctrica mediante plantas tradicionales de la CFE, cuyo costo y subsidio -que deviene del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF)- es mayor; esto implica que México no sólo no incentive la generación de energías renovables, sino que subsidie energías fósiles altamente contaminantes en contra del resto del mundo.
Desde COPARMEX exhortamos a los ministros de la SCJN a tomar en cuenta estos argumentos y anteponer el bienestar y el derecho a la salud de los mexicanos al momento de decidir si la reforma es inconstitucional o no.