En un final emocionante los Kansas City Chiefs ganaron el campeonato de la NFL, para dar señales del inicio de una dinastía. En lo económico, el “Super Domingo” dejó cifras millonarias y el crecimiento de la audiencia de adolescentes y “Swifties”; el aguacate mexicano mantuvo su exitosa presencia.
Dr. Pablo López Sarabia, profesor-Investigador de la División de Ciencias Económico Administrativas (DICEA), Universidad Autónoma Chapingo.
En lo deportivo, el Super Bowl LVIII dejó varios récords. En un final emocionante en tiempo extra, los Kansas Clity Chief obtuvieron su bicampeonato de la NFL ante los San Francisco 49ers por un marcador de 25 puntos a 22; en uno de los juegos más largos de la historia. Al tiempo que se estableció un récord de gol de campo de 57 yardas para un “Super Domingo”. Patrick Mahomes fue nombrado el mejor jugador del partido y entró al selecto grupo de quarterback más exitosos en la historia de la NFL. Por su parte, Andy Reid es el estratega y exitoso entrenador de los Chiefs desde el 2013, su disciplina y talento lo han convertido ya, en una leyenda de la NFL.
La ciudad de Las Vegas recibió por primera vez el Super Bowl dejando una derrama económica directa estimada en más de mil millones de dólares. La capital del entretenimiento y las apuestas recibió en su impresionante estadio Allegiant, con capacidad de 65 mil espectadores, el Super Bowl LVIII. Los boletos para el partido tuvieron un costo aproximado de entre 7 y 10 mil dólares, aunque los boletos más caros lograron alcanzar cifras cercanas a los 64 mil dólares. Las apuestas para el partido rondaron los 23 mil millones de dólares. Los premios para cada uno de los jugadores del equipo vencedor del Super Bowl fue de 164 mil dólares, mientras los jugadores del equipo perdedor recibieron 96 mil dólares. La presencia de México se mantuvo en el paladar de los aficionados estadounidenses, al demandar casi 138 mil toneladas de aguacate de Michoacán y Jalisco que fueron el aderezo perfecto para totopos y alitas.
Las cadenas de televisión con los derechos de transmisión estuvieron inundadas de anuncios, a fin de obtener la mayor rentabilidad del partido. La contaminación visual en las pantallas de TV abierta fue la constante, mientras se tuvo más moderación en la de paga o satelital. En EUA, el costo de cada spot publicitario de 30 segundos tuvo un costo de 7 millones de dólares. El espectáculo de medio tiempo del Super Bowl LVIII estuvo a cargo del cantante rapero Usher, teniendo su momento cumbre al cantar con su invitada Alicia Keys. Apple Music consiguió los derechos de patrocinar el espectáculo más importante de EUA, por cinco años consecutivos, por un monto total de 250 millones de dólares; es importante señalar que los artistas no cobran por su participación (aunque tienen una exposición a más de 100 millones de televidentes sólo en EUA), sólo reciben 15 millones de dólares para gastos de producción.
El “Efecto Taylor Swift” impulsa el valor de la marca NFL e incrementa nueva audiencia con un gran potencial comercial para el futuro cercano de la Liga. Desde que inicio el romance entre la estrella mundial del pop, Taylor Swift, con el icónico jugador de los Chiefs, Travis Kelce; el valor de la marca de los Chiefs y la NFL se ha incrementado en al menos 335 millones de dólares. Los fans de Taylor Swift mejor conocidos como “Swifties” han volteado a ver a la NFL. No sorprende que la audiencia de 12 a 17 años haya crecido 53% en relación con el promedio registrado el año anterior; así como la audiencia femenina que motivo a las compañías de salud, belleza y cosméticos a anunciarse durante el partido. La penetración de la NFL en nuevas audiencias se puede fortalecer con la introducción del “Tocho Bandera” como deporte olímpico en 2028.