La economía del hidrógeno verde en México está en su etapa inicial con algunos planes de proyectos prototipos de la Comisión Federal de Electricidad y algunas otras empresas, que pronto posiblemente inicien, pero también hay que considerar que el mundo está en la etapa de entender y aplicar el hidrógeno como un vector de energía de costo competitivo para sustituir a los combustibles, dice Eduardo Andrade, director general de Burns & McDonnell México.
Hoy el hidrógeno verde no es una solución barata para el mercado, la viabilidad para implementar proyectos es para los sectores del alto valor agregado, como la industria de la alta tecnología, algunas manufacturas, y la generación de electricidad, que se puedan dar el lujo de pagar ese precio o iniciar proyectos prototipo.
“Hoy se consumen combustibles porque son baratos y su alta disponibilidad”, pero también es una realidad que los combustibles nunca serán tan limpios como el hidrógeno verde, y aunque se requiere energía a precios competitivos, esos precios tienen que traer costo ambiental. La experiencia de los proyectos a gran escala comercial en el mundo, que incluye a Estados Unidos, va marcando el momento de la incorporación generalizada en el mundo.
El hidrógeno verde tiene un alto potencial para la región del TMEC por ser una zona única y México puede aprovechar casi de inmediato la tecnología que se desarrolle en Estados Unidos y Canadá que hoy están invirtiendo en investigación y desarrollo.
En el escenario es importante contar con aliados con experiencia y desarrollo de tecnología para los proyectos, Burns McDonnell se perfila como un jugador clave en el sector del hidrógeno verde en México, hoy la empresa ya trabaja en proyectos a gran escala en Estados Unidos.