Los deepfakes representan una amenaza significativa en distintas esferas, a nivel social, económico y político. Mediante fotografías o videos fraudulentos creados con Inteligencia Artificial (IA), estas sofisticadas manipulaciones pueden ser utilizadas para realizar fraudes millonarios, dañar la reputación de las figuras públicas, o contribuir a la creación de fake news para manipular la opinión de los ciudadanos en contextos clave.
“La circulación de imágenes o videos creados mediante tecnología deepfake supone un gran reto. Por un lado en materia de robo de identidad, y por el otro, nos plantea un desafío ante la vulnerabilidad de las empresas, organismos o población en general, pues ya hemos visto casos de fraudes millonarios que puede hacerse a través de la suplantación de identidad mediante el deepfake”, explica Aaron Munguía, Chief Technology Officer (CTO) de Tu Identidad, plataforma especializada en validación de identidad de empresas y usuarios.
Añade que la proliferación de contenido digital manipulado también plantea desafíos significativos en torno a la autenticidad y la integridad de la data. “Incluso, si tomamos en cuenta el nivel de sofisticación de la IA podemos darnos una idea del nivel de riesgo al que están expuestas las grandes corporaciones, las pequeñas y medianas empresas y los individuos por igual. Si bien, el sector financiero es el blanco más claro de este tipo de amenazas, lo cierto es que los deepfakes representan un riesgo económico y reputacional en distintos niveles”.
De manera indistinta, todas las organizaciones están en riesgo. Datos del Foro Económico Mundial (FEM) señalan que tan solo en 2022 a nivel mundial, 26% de las pequeñas empresas y 38%, de las grandes sufrieron fraudes por deepfake, que les ocasionaron pérdidas de hasta 480,000 dólares. Aproximadamente, 66% de los expertos enciberseguridad se vieron afectados por ataques deepfake.
En ese sentido, el sector financiero ha sido el primero en implementar métodos avanzados de autenticación, como la biometría facial o dactilar, en respuesta a la necesidad de fortalecer la seguridad de las transacciones y proteger los datos confidenciales de los usuarios. Estas medidas no solo satisfacen los requisitos regulatorios que demandan la autenticidad en las operaciones, sino que también ofrecen una capa adicional de protección para los usuarios.
La respuesta está en los controles de validación de identidad
El CTO de Tu Identidad explica que el desarrollo de la IA y la democratización de esta tecnología ha permitido que cualquier usuario de internet pueda hacer uso de ella, de tal modo que cada vez será más común ver circulando en la red imágenes o videos fraudulentos con diversos fines, algunos de lucro, otros de creación.
No obstante, este desarrollo tecnológico también ha impulsado la creación de herramientas efectivas de prevención y detección de este tipo de contenido. Una de ellas es la biometría facial, tecnología que actualmente utiliza la banca.
“En la biometría facial se recolectan y encriptan minucias del rostro de un individuo, los cuales se comparan con una referencia para verificar su identidad. Cuando estamos frente a una imagen o video creado por deepfake, por mucho que se parezca a la persona, esta tecnología aún no logra igualar al 100% todas las minucias del rostro, entonces cuando se compara con la imágenes de referencia, ésta no coincide”, afirma el Muguía.
Agrega que además existen otras herramientas de validación como la prueba de vida, que detecta factores como la profundidad de video, voz o movimiento para saber si la otra persona es real o una simulación.
No obstante, señala que en la lucha contra los fraudes digitales, las empresas, gobiernos y ciudadanos tienen que unir fuerzas para combatirlos a través de uso de controles de validación e información. “Las empresas pueden cuidarse al emplear tecnología de validación de identidad y controles de seguridad internos. Los ciudadanos por su parte, al hacer un uso responsable del internet, no compartir información de dudosa procedencia o no exponer sus datos sensibles. Este problema nos afecta a todos, pero afortunadamente,
todos podemos hacer algo para combatirlo”, concluye el CTO de Tu Identidad.