A lo largo de la historia, México ha obtenido oficialmente 73 medallas en juegos olímpicos -13 de oro, 24 de plata y 36 de bronce- destacando en el plano individual como máximos medallistas el clavadista Joaquín Capilla, el ecuestre Humberto Mariles, y la taekwondoína María del Rosario Espinoza. Por supuesto, también resaltar la única medalla de oro colectiva obtenida por el equipo de fútbol varonil derrotando en el mítico Estadio de Wembley a Brasil en la final durante las Olimpiadas de 2012 celebradas en Londres.
México arranca el 2024 -como cada seis años- con las expectativas de los mexicanos puestas de manera importante en la transición del poder ejecutivo, y tiene como día para marcar en el calendario el 2 de junio, ya que ese es el día en el que decidiremos -con nuestro voto- quién será nuestro presidente para el próximo sexenio.
Asimismo, en el sector energético vuelven a surgir las interrogantes de hace varios años: ¿PEMEX y CFE seguirán teniendo un rol preponderante?, ¿el sector privado tendrá una mayor participación?, ¿cuál será el peso de las dos empresas productivas del estado en las decisiones financieras de país?, ¿los trabajadores de CFE y PEMEX merecen los sueldos, prestaciones y pensiones que reciben conforme a sus contratos colectivos de trabajo? y sobre todo ¿cuál será la nueva política energética de aquí al 2030? Sin entrar en detalles electorales -o en pronósticos que se ponen de moda según la encuesta de su preferencia- lo que podemos afirmar es que a partir del próximo 1 de octubre de 2024: a) Tendremos a una mujer como titular del poder ejecutivo, b) Esa persona contará con formación matemática y con un mejor conocimiento de temas energéticos a diferencia de nuestro actual presidente, c) CFE y PEMEX seguirán siendo una parte muy importante de nuestro sector y d) Como país, tendremos una política energética que será diferente -en mayor o menor medida- a la de la presente administración.
Regresando a las actuaciones de los deportistas mexicanos en juegos olímpicos, la mejor actuación se registró en 1968 cuando México fue sede de la Olimpiada (primera nación latinoamericana en conseguirlo) y nuestros atletas cosecharon un total de 9 medallas -3 de oro, 3 de plata y 3 de bronce- teniendo momentos memorables para nuestra historia deportiva, destacando lo sucedido en la Alberca Olímpica Francisco Márquez donde las lágrimas de Felipe “Tibio” Muñoz conmovieron a los aficionados de la natación a nivel mundial, tras ganar la medalla de oro en los 200 metros estilo pecho.
Ahora bien, la nueva política energética que deberá establecer nuestra próxima presidenta deberá considerar todas las problemáticas que afectan al sector actualmente: por un lado, las limitaciones financieras de CFE y PEMEX, así como el costo de los subsidios para el presupuesto de nuestro país; por otro lado, las implicaciones de la participación del sector privado y la volatilidad en los precios de los energéticos derivada de las más recientes situaciones geopolíticas. Finamente, el acceso a nuevas tecnologías tanto en electricidad como en hidrocarburos, los compromisos de México derivados del
calentamiento global y el incremento en la demanda generado por el “nearshoring” serán también parte de la ecuación a resolver por la próxima titular del ejecutivo.
Reitero algo que he mencionado en columnas anteriores, para nosotros como mexicanos debemos tener presente que la creación de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en 1937 y de Petróleos Mexicanos (PEMEX) en 1938, han sido los hitos más importantes en el pasado que nos permitieron sentar las bases tanto en electricidad como en hidrocarburos del mercado energético actual. Sin embargo, hoy más que nunca, la realidad de ambas empresas productivas del estado -sin entrar en temas políticos- refleja que existen áreas de evidente mejora en ambos casos para poder seguir incrementando la calidad de nuestro sector, incluyendo -entre otras cosas- la participación de la iniciativa privada.
Las elecciones presidenciales en México se realizarán el próximo 2 de junio y los juegos olímpicos de París se celebrarán entre el 26 de julio y el 11 de agosto; en ambos casos los mexicanos estaremos pendientes de los resultados de nuestro ejercicio democrático y del desempeño de nuestros atletas que buscarán poner el nombre de México en lo más alto de cada disciplina deportiva.
Nuestro país y nosotros como mexicanos, somos más importantes de lo que sucede cada seis años en una elección presidencial y mucho más grandes en nuestras coincidencias como seres humanos que en nuestras diferencias políticas actuales. Así como nuestros deportistas nos representarán en Paris este verano con la bandera de México, tras haber tenido actuaciones históricas en cuanto al número de medallas obtenidas en los centroamericanos de San Salvador y los panamericanos de Santiago el año pasado; nosotros como ciudadanos, también tenemos el compromiso democrático de ejercer nuestro derecho al voto, respetando las opiniones distintas a las propias y construyendo un mejor país para el futuro donde la bandera de México siga ondeando en lo más alto.
VICTOR LUQUE / FINANCIAMIENTO ENERGÉTICO
SOCIO – ATIK CAPITAL PRESIDENTE DEL CONSEJO DE HABITAT PARA LA HUMANIDAD MÉXICO
EXCONSEJERO NAFIN, BANCOMEXT, BANOBRAS, CFE Y CONAVI
CATEDRÁTICO DEL ITAM DESDE 2004