Este término se acuñó en el feminismo de los 70s(1), para dar nombre a un movimiento que identifica la relación entre la explotación del medio ambiente y la opresión de las mujeres. Para el movimiento feminista y ecologista de esa época, se vuelve evidente la necesidad del hombre por el dominio como fórmula para la afirmación del ser humano, que se refleja tanto en las relaciones interpersonales de un género con el otro y en la relación del humano con la naturaleza; justificando el dominio y la marginación a partir de devaluar lo diferente, en este caso, la mujer del hombre y lo natural de lo humano.
¿Cómo es que esta devaluación se relaciona? Se considera que en ambos casos se explota a través del trabajo reproductivo invisibilizado y no reconocido, haciendo referencia a las tareas de reproducción, crianza, resolución de necesidades básicas, salud, apoyo emocional en el caso de las mujeres y a la creencia de que cualquier cosa en el planeta está a disposición del bienestar del ser humano, como sí la tierra tuviera la obligación de reproducirnos, cuidarnos y saciar nuestras necesidades.
A pesar de que las principales exponentes del eco-feminismo son consideradas esencialistas(2) por relacionar la existencia de la mujer con una necesidad inherente de protección, en este caso al cuidado del medioambiente, para mi existe un análisis más profundo y valioso que se origina de la pregunta ¿Qué fue primero el cuidado al medioambiente o el concepto patriarcal de mujer cuidadora y proveedora de vida?
Por ahora, los hechos señalan que sin duda alguna, fue hasta hace poco que la mujer tuvo el mínimo acercamiento a las grandes decisiones que hasta ahora han resultado en el sistema capitalista que nos rige, mismo sistema que se ha servido de la naturaleza sin ningún tipo de reserva, por lo que a partir de ello me permito señalar que ha sido en su gran mayoría hombres aquellos que eligieron la explotación como base del desarrollo humano.
Ahora bien, para el sistema capitalista patriarcal, la mujer sirve un papel de cuidadora y protectora, razón por la cual las mujeres son las interesadas en que los recursos del mundo no se acaben y poder así proveer cobijo y alimento a su familia. Así es como las mujeres históricamente encabezan las luchas ecologistas y también son el mayor porcentaje de las representantes en las mismas(3); aunque para este punto es importante mencionar que quienes luchan son mujeres racializadas, que a su vez se ha demostrado son quienes más repercusiones tienen por el cambio climático, dejando claro que las luchas medioambientales para la mujer son una necesidad resultante de un sistema que las oprime.
Aunque la respuesta a mi pregunta puede depender del concepto de feminismo o de ambientalismo, me parece que, la resistencia de las mujeres a un sistema capitalista patriarcal, también es la resistencia a un sistema explotador del medioambiente.
Biografía:
1)Ecofeminismo y ambientalismo feminista: Una reflexión crítica. Argumentos (Méx.) [online]. 2008, vol.21, n.56, pp.183-188. ISSN 0187-5795.
2)Women and Life on Earth: ¿Qué es el ecofeminismo? (s. f.). WLOE. http://www.wloe.org/que-es-el-ecofeminismo.308.0.html
3)Feminismos del Sur y ecofeminismo | Nueva Sociedad. (2015, 1 marzo). Nueva Sociedad | Democracia y política en América Latina. https://nuso.org/articulo/feminismos-del-sur-y-ecofeminismo/