Análisis
S&P Global
El presidente Donald Trump se ha burlado de la tecnología limpia, como parques eólicos, paneles solares y vehículos eléctricos, como parte de un engaño climático. Trump ha prometido derogar o desfinanciar aspectos de la Ley de Reducción de la Inflación y relajar las restricciones al carbón, el petróleo y el gas natural. Con el control republicano de ambas cámaras del Congreso, gran parte del poder judicial federal y la Casa Blanca, el apoyo político a las energías renovables y la energía limpia parece haber desaparecido. Sin embargo, los informes de la desaparición de la tecnología limpia pueden ser prematuros, según un reciente libro blanco publicado por S&P Global Commodity Insights.
Bajo la Ley de Reducción de la Inflación, el 88 %, o más de 53 mil millones de dólares, de las inversiones en tecnología limpia están programadas para los estados que Donald Trump ganó en las elecciones presidenciales de noviembre de 2024. Esto haría políticamente difícil para el presidente eliminar estas inversiones por derecho. Algunas de estas inversiones podrían ser alteradas o renombradas bajo el proceso de conciliación presupuestaria del Congreso, pero sacar fondos federales de Ohio o Tennessee podría no ser políticamente prudente.
La creciente demanda de energía de los centros de datos también dificultará la derogación del apoyo a los proyectos de infraestructura energética bajo la Ley de Reducción de la Inflación. La demanda total de electricidad de los Estados Unidos de los centros de datos para 2035 podría ser igual a la demanda combinada de electricidad residencial de 2023 para Texas, California, Florida, Nueva York y Nueva Jersey. Según S&P Global Commodity Insights, satisfacer esta demanda requerirá una mayor generación de energías renovables y gas natural. El flujo de acuerdos dentro de los mercados energéticos ya está aumentando, con los actores del mercado privado impulsando la expansión de la red y la capacidad.
El almacenamiento de energía se está moviendo al centro de la escena a medida que el interés de las transacciones y las necesidades de apoyo han aumentado en los últimos 14 meses. Los sistemas de almacenamiento de energía de la batería y el almacenamiento de gas natural están atrayendo el interés de los inversores. El exceso de capacidad en el mercado chino de baterías de red ha reducido los costos de almacenamiento de energía. En un reciente proceso de licitación, la adquisición de almacenamiento de energía de 16 GWh de Power Construction Corp. de China recibió ofertas de 76 licitadores que oscilan entre 60 $/kWh y 70 $/kWh. En los Estados Unidos, el precio suele estar entre 125 $/kWh y 150 $/kWh.
La administración actual ha prometido una “edad de oro” para la economía y la industria de los Estados Unidos, pero es difícil imaginar un impulso de reindustrialización que evite las nuevas tecnologías de producción y almacenamiento de energía. Si bien el destino de las industrias de tecnología limpia en el país puede depender de las agendas conflictivas de diferentes personalidades dentro de la administración, la demanda de poder impulsará miles de millones de dólares en inversiones y acuerdos. Las necesidades económicas y de mercado pueden tener un mayor mano que decir en la futura mezcla energética que la retórica política.