La compra y venta de cables piratas es frecuente en el mercado eléctrico, lo que representa una competencia desleal, pero ahora se suma la falsificación de certificaciones de dichos cables para hacerlas más reales, pero al momento de verificarlas no existen.
La mayor preocupación son los riesgo y peligros que corren los usuarios, desde un incendio o explosión, hasta la pérdida de infraestructura y productividad, señaló Fernando Hernández, gerente de Ingeniería en Charofil, en entrevista con Factor Energético en el marco de la SIEC CANAME 2023.
Una de las preocupaciones desde hace tiempo ha sido que desde el punto de vista normativo y certificaciones sigan exigiendo o se promueva el uso y cumplimiento de materiales certificados en los materiales eléctricos que garantizan la calidad y la seguridad. No obstante, hemos encontrado en el mercado que falsifican certificaciones y evidentemente eso hace que sea una competencia desleal.
Esto es muy grave, si usted toma un número de nuestra certificación, consulta en la UL y no aparece, lo que evidencia la falsificación. Y aunque no se tiene una estimación de la frecuencia de estos materiales de mala calidad, sí es algo que debe de preocupar.
A nosotros nos preocupa como fabricantes nacionales, pero también debería preocupar a los consumidores, por un lado, y a las entidades que se dedican a la vigilancia de toda esta práctica, como es la Secretaría de Energía, a través de Unidades de Verificación o las Unidades de Inspección.