Londres − Shell ha reiniciado la producción en el yacimiento Penguins en el Mar del Norte del Reino Unido con una moderna instalación flotante de producción, almacenamiento y descarga (FPSO) (Shell 50%, operador; NEO Energy 50%). La ruta de exportación anterior para este yacimiento era a través de la plataforma Brent Charlie, que cesó su producción en 2021 y está siendo desmantelada.
Se estima que la producción máxima será de unos 45,000 barriles de petróleo equivalente por día (bpe/d) y actualmente se ha descubierto un volumen de recursos recuperables estimado de aproximadamente 100 millones de bpe. Aunque se trata principalmente de producción de petróleo, Penguins también producirá suficiente gas para calentar alrededor de 700,000 hogares del Reino Unido por año.
El nuevo FPSO tendrá emisiones operativas aproximadamente un 30% menores en comparación con Brent Charlie y se espera que extienda la vida útil de este importante campo hasta por 20 años.
“Hoy en día, el Reino Unido depende de las importaciones para satisfacer gran parte de su demanda de petróleo y gas”, afirmó Zoë Yujnovich, directora de Gas Integrado y Upstream de Shell. “El yacimiento Penguins es una fuente de producción de energía doméstica segura que la gente necesita hoy en día, y la FPSO es una demostración de nuestra inversión en proyectos competitivos que crean más valor con menos emisiones”.
Aunque el petróleo se transportará en buques cisterna a refinerías fuera del Reino Unido, estas incluyen aquellas que suministran productos refinados como gasolina y diésel al Reino Unido debido a su limitada capacidad de refinación.
El gas natural se transportará a través del gasoducto existente hasta la terminal de gas de St Fergus, en el noreste de Escocia, que abastece a la red nacional de gas del Reino Unido.
La remodelación del yacimiento Penguins ha implicado la perforación de pozos adicionales, que están conectados al nuevo FPSO. El yacimiento se encuentra a 165 metros (541 pies) de profundidad, a unas 150 millas al noreste de las Islas Shetland. Descubierto en 1974, el yacimiento produjo petróleo y gas entre 2003 y 2021.