El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) ha realizado diversos análisis e investigación para generar información que permite identificar y medir las barreras que enfrentan las mujeres para entrar, permanecer y crecer en la economía remunerada.
En el marco del Día Internacional de la Mujer, estos son los 8 datos o mejor aún, retos por superar para lograr la equidad económica:
1.- Las mujeres en las empresas
Al menos 33 de 157 empresas que cotizan en las bolsas de valores no tienen mujeres en sus consejos de administración ni en las direcciones relevantes. En el sector privado hay pocas mujeres que ocupan puestos de toma de decisiones y su representación se reduce cuanto más elevado es el cargo.
En 2021, de los dos mil 507 consejeros totales que participan en las empresas listadas en las bolsas, solo 10% son mujeres. Este problema también permea en los puestos directivos. Solo cuatro empresas de las 157 analizadas tienen una directora general. Y 3% de las empresas no reportaron los datos de género que exige la normatividad.
Además, dos de las 10 compañías más grandes del Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) aún no cuentan con mujeres en sus consejos. La empresa con mayor representación de mujeres en su consejo de administración tiene una proporción de 33%.
2.- Estados y género
De acuerdo con el IMCO, 30 estados reprueban en ofrecer condiciones óptimas para las mujeres. Las entidades federativas, a excepción de Ciudad de México y Baja California Sur, obtuvieron menos de 60 puntos en la medición Estados #ConLupaDeGénero, debido a las barreras que enfrentan las mujeres para entrar, permanecer y crecer en el mercado laboral.
La entidad y la etapa profesional en las que se encuentra una mujer determinan su participación en el mercado laboral. Así en la parte de Entrada: La entidad con mejor desempeño en este pilar es Yucatán, seguida de Baja California Sur y Baja California. Estas entidades tienden a tener menor desigualdad en la distribución del trabajo no remunerado.
En Permanencia: Los tres estados con mejor desempeño en este pilar son Nuevo León, CDMX y Aguascalientes. Sin embargo, estas entidades enfrentan retos importantes como una alta brecha salarial, baja cobertura en educación en la primera infancia y un número alto de mujeres con jornadas laborales largas.
En Crecimiento: Las tres entidades con mejor desempeño en este pilar fueron Colima, CDMX y Baja California Sur. Estos estados tienden a tener mayor participación política de mujeres en puestos de liderazgo como en las alcaldías, las presidencias clave de los congresos estatales y titulares en instituciones de los gobiernos estatales.
3.- Aportación de las mujeres a la economía
Más mujeres con autonomía económica permitiría tener una economía más próspera. El IMCO encontró que para 2030, el PIB de México podría ser 15% mayor que el PIB de 2020 si el gobierno y el sector privado implementan acciones para sumar a 8.2 millones de mujeres a la economía en los próximos 10 años.
La tasa de participación económica de las mexicanas es muy baja. Hasta antes de la pandemia, solo el 45% de las mujeres mayores de 15 años contaban con un trabajo o estaban en búsqueda de uno. Sin embargo, la pandemia borró el escaso avance de los últimos 15 años, lo que representa toda una generación perdida.
Más mujeres en el mercado laboral se traduce en libertad económica para ellas y beneficios económicos para sus familias y el país. De no implementar una agenda sustantiva y real para la igualdad entre hombres y mujeres, y mantener la tendencia actual, México tardaría casi 60 años en alcanzar la tasa de participación económica promedio de los países de la OCDE.
4.- Trabajo no remunerado
Si el trabajo no remunerado fuera un sector, sería el más grande del país por su valor económico. La estimación para 2020 fue 47% mayor que el valor del sector comercio y cinco veces más grande que el sector transporte.
En 2020, las tareas del hogar y de cuidado ejecutadas tuvieron un valor que asciende a 6.4 billones de pesos, equivalente a 27.6% del PIB. El dimensionar el valor muestra su importancia y visibiliza la carga de desigualdad que enfrentan las mujeres.
Cocinar, lavar ropa, hacer limpieza, comprar alimentos, mantener la casa y cuidar niños, entre otras, son actividades necesarias que se realizan a diario en los hogares. A pesar de no tener un precio asignado, sí tienen un valor económico y conllevan un costo de oportunidad, pues representan la cantidad de tiempo invertido y dinero que una persona podría haber obtenido en el mercado laboral u otra actividad productiva.
5.- Brechas de género en carreras STEM
En México, solo 3 de cada 10 profesionistas que eligieron carreras STEM son mujeres (aquellas carreras relacionadas con ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés). Los egresados de carreras STEM en promedio reciben un sueldo 8% mayor que el resto de las áreas y la brecha de ingresos entre hombres y mujeres es menor (por cada 100 pesos que gana un hombre en STEM, una mujer gana 82, a diferencia de 78 que gana en otras áreas).
La brecha salarial en STEM se explica por el tipo de trabajos que elige cada sexo. Las mujeres tienen mayor probabilidad de ser oficinistas o dar clases, mientras que los hombres tienden a ocupar puestos en plantas industriales.
Las científicas enfrentan el mismo tipo de barreras para entrar, permanecer y crecer en el mercado laboral. Un síntoma de ello es una diferencia de 14 puntos porcentuales en las tasas de participación económica de profesionistas STEM sin hijos (78%) y con hijos (64%).
6.- El emprendimiento femenino
Ocho de cada 10 emprendedoras son informales en México, según el análisis sobre las características sociodemográficas de las emprendedoras mexicanas, en el que se identificaron las principales barreras que les impiden dar el salto a la formalidad y consolidar su negocio. En México 26% de las trabajadoras son emprendedoras. De este porcentaje, el 82% se encuentra en la informalidad.
En México, ocho de cada 10 emprendedoras operan en la informalidad. Una emprendedora mexicana promedio tiene entre 25 y 44 años, está casada, tiene uno o dos hijos, gana 3 mil 707 pesos al mes, estudió hasta secundaria y opera en la informalidad.
Las emprendedoras enfrentan tres principales retos para formalizar su negocio: el alto costo de trámites administrativos (en tiempo y dinero), la falta de acceso a financiamiento y la falta de capacitación en temas como finanzas, contabilidad o desarrollo de negocios
7.- Mujeres con rango en la educación
Solo 35% de las direcciones generales de educación, ciencia y tecnología cuentan con una mujer al frente; y solo 20 de 54 instituciones de educación, ciencia y tecnología son encabezadas por mujeres.
De igual manera, 39% de los puestos de mando medio, que incluyen direcciones y subdirecciones de área, así como jefaturas de departamento, es ocupado por una mujer. La dirección general adjunta es el puesto con menor proporción de mujeres, ya que 29% está ocupado por mujeres.
Destaca que como administrativo y operativo, 6 de cada 10 puestos de enlace, último nivel en la estructura federal, son ocupados por mujeres. Existen contrastes entre instituciones. Mientras que en la SEP solo 24% de los puestos de mando superior es encabezado por una mujer, en el Conacyt esta cifra asciende a 54%.
Los ingresos de las mujeres son menores que los ingresos de los hombres en las instituciones públicas de educación, ciencia y tecnología.
8.- Mujeres en la Administración Pública Federal
La desigualdad en la Administración Pública Federal persiste. Aunque las mujeres están mejor preparadas, la desigualdad de género en los puestos directivos de las secretarías de Estado permanece. En las secretarías de Estado, las mujeres ganan 10% menos que los hombres en los puestos de mando medio y superior.
La presencia de mujeres al interior de las secretarías de Estado disminuye conforme se eleva el puesto y el nivel de ingresos. Solo el 30% de las direcciones generales son ocupadas por mujeres, mientras que este porcentaje disminuye a 28% para las jefaturas de unidad, el tercer puesto de mando más alto.
Hoy, México cuenta con un Congreso paritario, con el 48% de mujeres en la Cámara de Diputados y el 49% en el Senado de la República, así como con el mayor número de secretarias de Estado en la historia del país. nueve de 19 secretarías están encabezadas por una mujer (47%).