Cubrir las necesidades energéticas del país y avanzar en la transición energética no deben depender solo de la generación de energía a través de hidroeléctricas, pues su manejo se ha vuelto cada vez más complejo, coincidieron expertos en el sector de energía renovable. Consideraron que hay otras alternativas de energías renovables que se pueden desarrollar.
La plataforma Renovables X México realizó el webinar “El potencial de las hidroeléctricas para la transición energética que México necesita”. Se trató de un espacio donde se discutieron las metas y compromisos internacionales ante el cambio climático; y se analizaron las distintas fuentes de generación renovable que pueden complementar el trabajo de las hidroeléctricas en el camino hacia la transición energética.
Más allá de las hidroeléctricas
En su intervención, Jacobo Merkler, Presidente de la Asociación Mexicana de Energía Hidroeléctrica A.C (Amexhidro), afirmó que para la generación limpia de electricidad no existe una solución única para todo el territorio nacional.
Señaló que México tiene recursos hidroeléctricos abundantes, pero también es rico en recursos solares y eólicos en diferentes regiones. Por ello, dijo, los países tienen que usar todos los elementos que estén a su disposición para poder cumplir de la mejor manera con los Objetivos de Desarrollo Sostenible con los que se han comprometido.
Sequías afectarían generación de energía
Ricardo Cruz, Consultor en energía y acción climática de Iniciativa Climática México (ICM), declaró que: “de las 98 centrales que acumulan 1260 MW disponibles para generar energía eléctrica, 60 pertenecen a la CFE y acumulan 96% de la capacidad.”
“La gran mayoría de la capacidad hidroeléctrica del país pertenece a CFE y proviene de las grandes presas que se han instalado en las grandes cuencas hidrológicas, que ya no permiten poner técnicamente nuevas presas”.
No obstante, destacó que la gestión del agua en las presas se ha complicado por los efectos del cambio climático. La ley de aguas nacionales indica que la prioridad en el uso del agua es el consumo humano, por lo que el uso sistemático de agua para generar energía eléctrica, podría ocasionar escasez de agua. Hoy en día ya se ven fuertes temporadas de sequía y el agua no se ha utilizado para generar energía eléctrica”.
Complejo el manejo de presas
Finalmente, María Teresa Souza, experta en derecho ambiental, señaló que las grandes hidroeléctricas tienen implicaciones ambientales y sociales importantes, entre las que destacó la inundación de grandes extensiones de terreno, el desplazamiento de comunidades y la pérdida de bosques y selvas.
Consideró que “el manejo de las grandes presas debe tomar en cuenta los otros usos y usuarios y, sobre todo, los riesgos y vulnerabilidad ante el cambio climático. Todo ello hace más complejo y delicado el manejo de grandes presas”. Ante ello, señaló que “deberíamos considerar usar de manera más eficiente otras fuentes de energías alternativas”.
Transición energética limitada
Los tres expertos que participaron en el webinar coincidieron en que México no va a cumplir con las metas del acuerdo de París. Se requiere hacer mayores esfuerzos para limitar las emisiones de carbono; y esto solo puede lograrse transitando hacia energías renovables.
Pero sobre todo, subrayaron, hacia el uso complementario de todas las fuentes de energía renovable con las que cuenta un país.
En la firma del Acuerdo de París, México se comprometió, para 2024, lograr que el 35% de su energía provenga de fuentes renovables. Si bien más del 25% de nuestra red eléctrica ya opera con estas fuentes, aún queda mucho camino por avanzar para alcanzar este objetivo.