En línea con la expectativa del mercado y con mi escenario central, la Fed siguió con su ciclo de alzas en diciembre, aunque a un ritmo más moderado, para ubicar la tasa de fondos federales en un máximo de 4.5%. La inflación general y subyacente seguirá aumentando en 2023, según las nuevas proyecciones de la Fed, se advierten de presiones inflacionarias asociadas a alimentos y energéticos fundamentalmente, así como a los efectos de la guerra entre Rusia y Ucrania en la cadena de suministros.
La tasa terminar de la Fed se ubica en el 5.1% dada las proyecciones de los “Dots-Plot”, registrando bajas en su tasa de referencia para el 2024.
La mala noticia para México, es que el crecimiento proyectado para los EUA en el 2023 se recortó a la baja de manera significativa para ubicarse en 0.5% (por debajo de la estimación del FMI del 1%). Aunque se disipan los riesgos de recesión en EUA, es claro que el fenómeno de “estanflación” seguirá a nivel mundial durante gran parte del 2023 y México no será la excepción.
Es inminente que Banxico cerrará su tasa de referencia en 10.5%, ya que tendrá que replicar lo realizado por la Fed (subida de 50pb); es importante señalar que aunque su función de reacción tiene varios componentes la política monetaria relativa sigue siendo el factor clave y el desacoplamiento aún está lejos de ocurrir, aunque la constante de la reunión del 15 de diciembre será una eventual decisión dividida de la Junta de Gobierno (Gerardo Esquivel quien ya visualiza un desacoplamiento en los ciclos monetarios de México y EUA, ya veremos).
Mayores alzas en el 2023
La Reserva Federal elevó el rango de la tasa de interés en 50 pb., a un rango de 4.25- 4.50%, en línea con nuestra expectativa y la del consenso.
La decisión fue unánime y se adelantó que habrán más ajustes en las tasas; la mediana de proyecciones de los miembros del Comité apunta a otros
75 pb. de alzas en 2023. Se elevó la previsión de inflación para este y los próximos años; se recortó la del PIB para 2023 y 2024.
El departamento de Análisis de BX+ explica que el comunicado vuelve a notar que la actividad y el empleo avanzan moderadamente. Incluso, los miembros del Comité esperan un mayor crecimiento económico este año respecto a lo previsto en septiembre. Por otro lado, las
previsiones del PIB y empleo para 2023 y 2024 son más pesimistas (Tabla 1), ante una mayor restricción monetaria.
Para la inflación, como en comunicados previos, se reitera que permanece elevada, a causa de los efectos de la pandemia y la guerra en Ucrania. La inflación esperada se ajustó al alza para este y los siguientes años; no volvería a niveles cercanos al 2.0% antes de 2025. Como riesgos sobre el panorama para la actividad y los precios, de nuevo, se resaltó a la guerra en Ucrania.