Por Vianey Amellali García Moreno Carlos David Franco Vergara
El Sistema de Comercio de Emisiones (SCE) comúnmente llamado mercado de carbono es un instrumento de mercado que ha sido implementando en los últimos años como medida para combatir el cambio climático ocasionado por las emisiones de gases de efecto invernadero.
De acuerdo con la Asociación Internacional de Acción sobre el Carbono, ICAP por sus siglas en inglés (Internacional Carbon Action Partnership), actualmente existen 29 Sistemas de Comercio de Emisiones en funcionamiento y 20 más en fase de desarrollo.
Ahora bien, en términos generales, el SCE funciona a través de tres elementos relevantes:
¿México cuenta con SCE? El 13 de julio del 2018, se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) reforma a la Ley General de Cambio Climático (LGCC) que incentivó la creación de un SCE como instrumento para la promoción del desarrollo industrial bajo en carbono y el cumplimiento de las metas climáticas sectoriales de México.
Específicamente en su artículo 94, la LGCC estableció que “La Secretaría, …, establecerá de forma progresiva y gradual un sistema de comercio de emisiones con el objetivo de promover reducciones de emisiones que puedan llevarse a cabo con el menor costo posible, de forma medible, reportable y verificable, sin vulnerar la competitividad de los sectores participantes frente a los mercados internacionales”.
Asimismo, la LGCC en su artículo Segundo Transitorio, estableció que: “Previo a la implementación del sistema de comercio de emisiones …, se establecerán las bases preliminares para un programa de prueba sin efectos …, mismo que tendrá una vigencia de treinta y seis meses”.
Posteriormente, el 1º de octubre del 2019, se publicó en el DOF el acuerdo en el que se establecen las bases preliminares del “Programa de Prueba del Sistema de Comercio de Emisiones” (el “Programa”) como fase inicial del SCE a fin de que los involucrados conozcan el comportamiento del mercado de emisiones y finalmente consolidar la fase operativa.
Algunos de los objetivos, características generales y obligaciones de los participantes del Programa son:
Así, resulta evidente que en México existe por el momento solo un Programa Piloto que busca preparar al sector energético y a las industrias para su participación en un SCE, sin embargo, resultan cuestionables los avances o resultados del Programa actual, pues en realidad el SCE no ha podido comenzar operaciones.
De acuerdo con el Programa, su vigencia estaba prevista por 36 meses, de los cuales, los primeros 24 meses correspondieron a la fase piloto, y en los últimos 12 meses se haría la transición a la fase operativa, concluyendo el 31 de diciembre del 2022 , no obstante, no se consolidó la transición hacia la fase operativa del SCE y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales emitió un aviso a los participantes señalando que debían presentar su informe y dictamen de verificación a más tardar en septiembre del 2023, e informó que continuaría en proceso la formalización del SCE para alcanzar su fase operativa.
Actualmente, después de casi 2 años de concluido el plazo para la fase de transición, el SCE en México sigue en etapa piloto y los bonos de carbono continúan siendo operandos de forma voluntaria, lo que hace palpable la falta de organización y compromiso del Estado de mexicano para cumplir con las metas nacionales e internaciones en materia de reducción de emisiones y cambio climático, siendo el reto principal, lograr la correcta consolidación e implementación de un SCE que beneficie en la reducción de emisiones contaminantes y con ello el combate al cambio climático.