El consumo de electricidad es uno de los principales aspectos que se deben vigilar en un data center. El papel insustituible de los centros de datos se refleja en los mercados globales de servicios y tecnología. Especialistas proyectan que este mercado alcanzará los 143 mil millones de dólares para 2027, frente a los estimados 59 mil millones de dólares en 2020.
Cada día se generan 2.5 quintillones de bytes de datos (2018), y la proliferación rápida de dispositivos inteligentes, realidad virtual, inteligencia artificial y aplicaciones de Internet de las cosas (IoT) está acelerando este ritmo. Tan es así que la consultora IDC intuye que para 2025 podría haber hasta 75 mil millones de dispositivos IoT generando hasta 79.4 zettabytes de datos.
Ante estos pronósticos ¿cómo se puede reducir el consumo de energía del centro de datos con mediciones precisas? Es importante mencionar que las variaciones mínimas en la temperatura en un sistema de refrigeración puedan tener un impacto significativo en los costos operativos generales de un centro de datos. Si bien este método es esencial para mantener la temperatura y humedad en niveles óptimos para el funcionamiento confiable de los servidores en data centers, la refrigeración y el aire acondicionado son solo superados por los equipos de TI en términos de consumo de energía, representando hasta el 40% de la demanda total de energía.
Ricardo Parada, Gerente de Ventas México y Latinoamérica para Vaisala, comenta que, en un reciente estudio de caso, se reveló que reducir la temperatura de un centro de datos en apenas 1°C puede aumentar los costos energéticos de refrigeración hasta un 8.5%: “Para un centro de datos de 50 MW, esto se traduce en un gasto adicional de 2.1 millones de euros en energía durante diez años. La precisión de los instrumentos de medición de temperatura que controlan el sistema de refrigeración es de suma importancia, ya que una baja precisión de ±0.5–1.0°C, por ejemplo, podría resultar en millones de euros de costos evitables y emisiones innecesarias de dióxido de carbono (CO2)”.
A medida que los data centers procesan más datos, aumenta el riesgo financiero asociado con el tiempo de inactividad. Un estudio del Instituto Ponemon encontró que, en promedio, los centros de datos experimentaron 2.4 apagones y diez eventos de tiempo de inactividad -durante 2020-, con un tiempo promedio de 138 minutos. Mantener una disponibilidad del 99.999% requiere una lucha constante para identificar el nivel óptimo de refrigeración y aire acondicionado.
El ejecutivo puntualiza que la medición concreta de la temperatura garantiza un control óptimo de la refrigeración: “Los instrumentos de temperatura y humedad de alta precisión de Vaisala cuentan con una precisión de ±0.1°C y ±0.8% RH, minimizando la desviación de los valores reales, permitiendo a los centros de datos controlar con exactitud la refrigeración y reducir los costos de energía. De esta manera, tanto propietarios como operadores de centros de datos, podrán ahorrar una cantidad significativa de energía, además de disminuir costos y emisiones de CO2”, concluye.